A veces el que necesita un hechizo de curación no somos nosotros mismos, sino alguien que amamos o nos importa.
Es importante recordar también que debemos asegurarnos de cuidarnos a nosotros mismos para poder cuidar a los demás. Para realizar este hechizo de manera efectiva, asegúrese de que está en buena salud y de que está de buen humor ya que no quiere disminuir el efecto del hechizo.
La salud es el elemento más importante de nuestras vidas. Es importante que uno se asegure de mantener su salud. Este hechizo puede ser usado para dar una mejor salud a un ser querido, o ayudar a sanar de un corazón roto.
Lo necesitarás:
Una vela con forma de hombre o mujer (dependiendo del género del sujeto)
Un pequeño cuchillo con una punta afilada
Aceite de mirra
Para empezar, usa el cuchillo y escribe el nombre de la persona que quieres curar en la vela. Puedes hacer esto en cualquier lugar de la vela, aunque lo mejor es escribir el nombre en la vela donde la persona se está lastimando. Por ejemplo, si la persona está deprimida, escribe su nombre en la cabeza. Si la persona se ha caído de espaldas, escribe su nombre en el reverso de la vela con forma. Después de que el nombre esté hecho, unge la vela con aceite de mirra.
Asegúrate de que el aceite llene el nombre que has rascado en la cera. Mientras unge la vela, imagínese que sus manos y las puntas de los dedos están hechas de energía blanca y curativa. Maneja la vela con cuidado, como si estuvieras atendiendo a la persona que estás enfermo.
Enciende la vela cuando termines y visualiza a la persona mejorando. Imagina que su cara está iluminada con un brillo saludable y adornada con una sonrisa. Imagina que se siente bien de nuevo y libre de enfermedad y dolor. Cuando termine, canta 3 veces «poderes curativos enviados por mí con la voluntad de curarte». Deja que la vela siga ardiendo hasta que se apague.