Las salamandras son criaturas parecidas a lagartos con cuerpos delgados y colas cortas.
Utilizan su piel viscosa para adaptarse a su entorno, algunos de ellos poseen un nivel de toxicidad suficiente para protegerlos con muchos depredadores.
La mayoría de las salamandras tienen cuatro brazos y una larga cola, algunas de ellas tienen una apariencia muy singular de anguila. Pueden crecer desde 2,7 cm. Hasta 1,8 m, un buen ejemplo sería la salamandra gigante china. Esta criatura tiene una forma muy única de rastrear a su presa. Usando una visión tricromática de color muy sensible, algunos de ellos pueden rastrear el cambio de presión en el agua.
La contribución de la salamandra a la rica cultura se remonta al período clásico, las salamandras aparecieron en las notas de Aristóteles, Benvenuto Cellini e incluso Leonardo da Vinci, describiéndola como una criatura legendaria. Plinio el Viejo incluso describe cómo vomita un cierto líquido y si ese líquido lechoso toca una parte de su cuerpo, puede ser fatal.
Si este animal se pone en contacto con usted, se le aconseja que es esencial cambiar la forma en que mueve su vida, física y espiritualmente, ya que la salamandra puede básicamente copiar el movimiento de los peces para proporcionarle una buena maniobra en el agua.
Las salamandras han sido asociadas con la química durante el período de renacimiento. También está relacionada con la fabricación de magia basada en el relato de los mitos, por lo que se la relaciona con el fuego. Irónicamente, las salamandras viven en agua que no está cerca del elemento fuego, pero la salamandra encontró su camino para ganar el equilibrio.
Recordándonos que debemos negociar con los elementos aunque sepamos que es completamente opuesto a nosotros, si logramos encontrar un equilibrio perfecto con él, nos causará enriquecimiento y desarrollo en la vida.
Todas las salamandras tienen la capacidad de regenerarse y hacer crecer sus extremidades durante un período de tiempo, representando, crecimiento, regeneración y nueva vida. Enseñándonos que no hay una pérdida absoluta de vida, siempre debemos encontrar lo que falta en nuestra vida y producir el crecimiento que la vida nos requiere.
Además, este animal sufre múltiples metamorfosis durante el curso de su vida, recordándonos que debemos aceptar todos los eventos que nos ocurren y que cambian la vida.
Las salamandras no sólo secretan veneno sino que también tienen glándulas que secretan hormonas para cortejar a sus parejas, recordándonos que debemos ser muy versátiles, ser venenosos para aquellos que intentan dañarnos pero al mismo tiempo amables con aquellas personas que valoramos.
Como pueden ver, las representaciones de las salamandras son muy diversas. Están aprendiendo a adaptarse a su entorno no luchando sino viviendo con él, aunque está en constante peligro con su naturaleza, las salamandras continuarán sobreviviendo con sólo abrazar los cambios en su entorno.
Es mejor aprender de una salamandra a luchar cuando se necesita y a huir cuando no. Ganarás una nueva parte de tu vida para reemplazar la vieja. Encuentra un equilibrio y aprende a crecer.
Salamandra aparece como un espíritu guía cuando
Necesitas entender la conexión entre la tierra y el agua.
Necesitas entender la conexión con los recuerdos del alma de los primeros tiempos de la vida en la Tierra.
Necesitas tener algún cambio en tu vida.
Necesitas entender lo que te rodea.
Necesitas consuelo en tu oscuridad.
Necesitas ser capaz de camuflarte ante la adversidad.
Llamar a Salamandra como guía espiritual cuando
Necesitas entender la conexión con los recuerdos del alma de la vida temprana en la tierra.
Necesitas tener algún cambio en tu vida.
Necesitas entender lo que te rodea.
Necesitas consuelo en tu oscuridad.
Necesitas ser capaz de camuflarte en la cara de la adversidad.