Ayudando a nuestra capacidad de enfocar y ver el panorama general, este chakra también se llama el chakra de la ceja, ya que se encuentra en la frente, justo entre los ojos.
El chakra del Tercer Ojo cubre la intuición y la imaginación; también, dando sabiduría y claridad en la toma de decisiones y del pensamiento. Este chakra se utiliza en muchas prácticas mágicas como el foco de la manifestación, ya que equilibrarlo puede permitir a una persona ver más allá del velo espiritual y formular la manifestación más allá de la ilusión de nuestro plano físico. Debido a esto, el chakra del Tercer Ojo es responsable de muchas de las prácticas más esotéricas, como la meditación, la meditación y la creatividad espiritual que está presente en la poesía y el canto.
Atributos del Chakra
Cristales: Sodalita y Lapislázuli
Ubicación en el cuerpo: Frente, entre las cejas
Afirmaciones: «Para ver y ser testigo de la verdad»…»
Correspondencias de colores y meditaciones
La energía del chakra del Tercer Ojo emana el color índigo y se equilibra con un amarillo profundo, a veces visto como oro. Una buena meditación de visualización para equilibrar las energías de este chakra dentro de uno mismo es visualizar un ojo en la ceja, el proverbial tercer ojo. Imagina que es de dos tonos, con un púrpura profundo, color índigo como color principal con manchas de amarillo profundo, similar al verde y al marrón de los ojos avellanos. Mientras el ojo se abre de par en par, toma nota de cómo tu cerebro ve automáticamente el color de este tercer ojo. Practica cambiando el color del ojo, creando una mezcla igual de índigo y oro (o amarillo). Toma nota de tus sensaciones físicas mientras los colores del ojo se equilibran en tu meditación. Para aumentar la conciencia con este chakra, la vibración de la palabra «Om» es muy beneficiosa o el Tercer Ojo, lo que hace más fácil de controlar y permite aumentar la conciencia espiritual.
El equilibrio del chakra
Cuando hay un exceso de energía dentro de este chakra, una persona puede notar efectos similares a los del chakra de la Corona, incluyendo una falta de imaginación para el reino espiritual o simplemente no estar inspirado. Esto no significa que alguien que es ateo automáticamente tenga un exceso dentro del chakra del Tercer Ojo, sin embargo usualmente se notará que éste para este tipo de personas necesita constantemente una sintonización. Una paradoja interesante, ya que normalmente carecen de la creencia para hacerlo. Dicho esto, para los típicamente abiertos de mente espiritual, un exceso aquí se presentará probablemente como la incapacidad de controlar sus demonios internos y el sentimiento de que no hay ayuda de Dios, del universo o de quien sea a quien le atribuyen sus creencias. La gente también experimentará un aumento de pesadillas, especialmente aquellos que se sienten como si fueran reales, tienen recuerdos intrusivos o recurrentes, se complacen en pensamientos de fantasía o se vuelven neuróticos.
La falta de energía en este chakra puede resultar en una sensación de depresión general donde la persona se hunde en un estado mental de visión de túnel. Esto es como una persona que sigue tomando malas decisiones en la vida, eligiendo hacerlo porque se siente bien, sin embargo le falta la capacidad de ver que es negativo y que lo ha hecho antes. Puedes reconocer esto en una persona que repite patrones de citas abusivas o en aquellos con problemas de adicción. Estas son versiones intensificadas de una energía negativa en este chakra, pero relacionables.
Para equilibrar el chakra, uno debe ser consciente del propósito y pasar tiempo familiarizándose con los atributos de ser espiritualmente consciente. Considera que cuando crees que has encontrado todas las posibilidades de un problema, siempre existe la solución que aún no has pensado. Trabajar en grupo, ir a la iglesia o incluso hablar con otros sobre temas espirituales es una buena manera de traer un equilibrio inherente. Meditar regularmente para visualizar el entorno actual es una buena manera de comprobar si este chakra está desequilibrado. Si encuentras difícil concentrarte o dudar de las prácticas en las que habitualmente confías, es probable que haya deficiencias en tu Tercer Ojo.