Si algo hay que decir es que los Leo son terriblemente pasionales y muy fogosos pero, a la vez todo aquello que se exigen a sí mismos lo reclaman de sus parejas.
En cuestiones de sexo, Leo es un excelente amante. Con muy poco podemos despertar la verdadera fiera que late bajo su pecho y que, a buen seguro no defraudará. Los Leo son personas que prefieren llevar la iniciativa y explorar nuevas posibilidades y sensaciones. Son personas, además, muy sensitivas e imaginativas, personas que nos pueden hacer estremecer con su intenso y apasionado arte de amar.
El romántico y embriagador Leo, un signo de fuego, es un amante seguro y ardiente, plagado de encantos personales y magnetismo físico, unas armas poderosas y letales en el arte del cortejo.
Son además personalidades que, al igual que en la vida, les gusta imponer su voluntad y dominar en todos los aspectos. Un Leo que en el sexo se muestra pasivo y sometido no es un Leo. La propia naturaleza de su signo es acción, dominio e intensidad.
Si nuestro deseo es seducir a un Leo, debemos tener en cuenta que son personas pasionales, intensas y que, tanto en el amor como en la pareja, lo dan todo. Cuanto tienen de racional y de profundo, en temas relacionados con el sexo se torna auténtica pasión, locura y entrega.
Es esencial entender que, para un Leo el placer es una cuestión esencial en la vida. Son, en esencia, los instintos más primarios e intensos los que se despiertan cuando amamos y somos amados. El signo del león se convierte en un amante perfecto. Muchos expertos en astrología piensan que el sexo, para este signo, es una oportunidad más de conquistar o poseer no solo un cuerpo, sino que también una capacidad de otorgar placer y de contemplar y poseer un alma y una voluntad. Nada más dramático para un Leo que caer en la rutina. Son personas que adoran las sorpresas. Por otro lado, un auténtico Leo no solo buscará su placer, sino que también estará abocado a buscar el de su pareja.
En lo referente al amor, los Leo son personalidades temperamentales, sensitivas y muy intensas en la vivencia de sus experiencias, pese a todo también son tiernos y dulces, en su interior.
Si anhelamos la conquista de un corazón Leo, debemos armarnos de paciencia y saber cómo llevar su agrio temperamento, en ocasiones. Por otro lado, casi seguro que será él (o ella) quien nos hechice a nosotros, debido a su poder persuasivo, a su inteligencia y su cultura.
Los Leo son también excelentes padres. Tienen un sentido muy profundo y asentado de la familia. Personas que tienden a imponerse e imponer unas reglas, un método de convivencia y unas normas para todos. Son, además, personas muy apegadas al hogar. Su vinculación nace de su necesidad de sentirse querido y amado, pero de una forma distinta a como pueden admirarle en el trabajo o en reuniones de amigos. La persona Leo busca en su hogar un reconocimiento como padre y como persona, no como persona recta y autoritaria, aunque esa es la impresión que puede dar en un principio.
Como se puede intuir, la personalidad de los Leo queda muy bien definida y bien diferenciada entre un contexto social, relacional y laboral, donde tienden a proyectar su energía sobre los demás y, en un contexto familiar o amoroso, donde, si bien conservan el instinto del león, como amantes, también propician unas relaciones tiernas y cargadas de afectos y ternuras.
Cómo conquistar el corazón de un Leo
Como ya hemos dicho el corazón del león es duro, difícil de conquistar y lo guarda muy en lo profundo de su ser. Es, además, un signo que debe llevar la iniciativa en el juego de la conquista (o al menos creer que es así).
Pese a todo, Leo es un signo noble, con un gran sentido familiar y capaz de ser perfecto amante y cónyuge. Es un signo, en esencia fiel y apegado a costumbres y formas de vida hogareñas y en familia. Por lo tanto el esfuerzo de una conquista bien habrá merecido la pena, en el caso de un hombre o una mujer Leo.
Si anhelas conseguir el corazón de un Leo, en adelante te vamos a aportar una serie de datos interesantes que te pueden llevar en tan complicada conquista. En todo caso, no debemos pensar en la dificultad del camino, sino en el posible resultado. Como todas las cosas, el amor, cuanto más difícil y esquivo es de conseguir, más, mucho más habrá merecido la pena.
Un Leo, como ya hemos dicho, es una persona que tiende a proyectar su energía en todo su entorno, bien sea el familiar o el laboral. Hemos de tener en cuenta que factores como su temperamento, su obstinación o su arrogancia, son elementos externos de su personalidad.
En realidad, un Leo es, también, una persona dulce, entregada, fiel y poderosa en su fuerza psíquica y espiritual.
Estos factores son elementos que un Leo, en la mayoría de las veces guarda tras la coraza forjada con el tiempo y la vida.
Conocer a un Leo por dentro es alcanzar la esencia de la persona perfecta, del marido perfecto y del amor en su más alta cumbre. Pero para ello, debemos sortear la tormenta de su genio, de su mal entendida arrogancia, a veces y debemos dejar que sea él quien lleve el proceso de conquista, o al menos hacerle creer que así es.
Se impone, más que nunca, el diseño de una estrategia. Los Leo son personalidades cultas, inteligentes y muy racionales. Tienen la capacidad de supeditar, en la mayoría de los casos, el amor a la razón. Ello puede ser una ventaja para nosotros. Debemos tener temas en común con un Leo. Arte, literatura, deportes, ciencia…
Lo esencial es buscar puntos en común con él y desarrollar una serie de afinidades. Leo, ya lo hemos señalado, es una personalidad observadora, detallista e inteligente. Una vez vayamos profundizando en la amistad, en los temas o en la relación iremos descubriendo una persona muy distinta a la que la figura del terrible león representa.
Leo, ya hemos dicho, requiere y necesita llevar la iniciativa en todas las facetas de la vida. Es por ello que debemos dejar que sea él quien proponga, si bien, será esencial hacerle entender, desde el comienzo, que una relación es cosa de dos, no de uno.
Debemos aprovechar otras cualidades para conseguir nuestros objetivos: su generosidad, su bondad, su lealtad o su moral son cuestiones que podemos y debemos tener en cuenta a la hora de plantear y desarrollar nuestra estrategia de amor.
Por regla general, un Leo asumirá con agrado pasear, viajar, visitar museos o acudir al cine o al teatro. Son cuestiones que debes sopesar según se le va conociendo, cuál de todas es la más efectiva para doblegar su salvaje, pero humano, corazón.
Una vez comprenda que somos compatibles al cien por cien, Leo admitirá en su corazón la posibilidad de algo más con nosotros. Bien sea una mujer Leo o un hombre Leo, el comienzo del verdadero amor será precisamente con el interés que logremos despertar en el o en ella a través de nuestros gustos y nuestras coincidencias.
Repito, una vez seamos un minúsculo puntito de curiosidad o esperanza en su corazón, en muy poco tiempo pasaremos a ocupar su pecho entero, sus pensamientos enteros y hasta su alma entera.
Es verdad, al león le cuesta entregar su corazón salvaje, domesticarlo y ponerlo en manos de otra persona; sin embargo, una vez lo hace, será de manera total, sincera y entregada. Podríamos identificar el corazón rendido del bravo león con el siguiente fragmento del autor mexicano Juan Rulfo:
“Yo pondría mi corazón entre tus manos sin que él se rebelara.
No tendría ni así de miedo, porque sabría quién lo tomaba.
Y un corazón que sbe y que presiente cual es la mano amiga,
Manejada por otro corazón, no teme nada”
Carta de J. Rulfo a Clara Aparicio
Cómo afronta una ruptura un Leo
Un Leo es ante todo seguridad en sí mismo. Una ruptura sentimental es un serio quebranto en el amor propio de éste. Es evidente que una ruptura, con todo lo que ello conlleva, no es agradable para nadie. Sin embargo, en los Leo, admitir una remota posibilidad de culpa queda muy lejos de su manera de ver y entender el mundo. A diferencia de otros signos, los Leo tienden a buscar causas y justificaciones siempre en otros.
Como ya hemos dicho, un Leo es perfecta pareja, fiel, abnegado y entregado a su proyecto familiar. Sin embargo, llegar a su corazón es complicado, también en ocasiones es bastante dificultoso seguir al lado de un Leo, ya que son, en su vertiente más negativa, personalidades que tienden al dominio y a ver una posesión de las cosas y las personas que están a su alrededor.
Por ello, un Leo en estado puro, acostumbra a tener múltiples parejas a lo largo de su vida, ya que en principio son expertos en el arte de la seducción.
Para un Leo una ruptura sentimental supone un serio fracaso en distintos campos de su vida. Se puede decir que no es solo cuestión del amor que se escapa de entre las manos; será cuestión fundamental, también, para un Leo, cuestiones como la confianza, su amor propio, su vanidad y el proyecto de futuro construido.
Es, como ya hemos dicho, una personalidad que, pese a su enorme inteligencia, no es capaz de deparar en la realidad del hecho. Siempre ve la culpa en la otra persona. En momentos de tensión emocional, es un signo que se niega en rotundo al dialogo, a una observación seria y serena del drama que está por llegar y, por defecto, debido a su gran vanidad, se niega también al diálogo sobre el asunto.
En este caso, la personalidad de los Leo se torna herida. Casi al instante los Leo se repliegan en sí mismos. Se aíslan y se prometen no confiar en nadie más, no amar a nadie más y crear su proyecto de futuro en solitario.
Sin embargo, la paciencia y la fidelidad no es una cuestión que mantenga, al menos en cuestiones de deseo, corazón.
Sentimentalmente estaremos ante una persona Leo, profundamente herida en su interior, sin embargo tienden a aparentar una desmedida fortaleza, sobre todo psíquica e intelectual.
No es raro que al poco de ser dejado, un Leo no tenga paciencia ni ganas para refugiarse en la nostalgia. La personalidad Leo tiende constantemente, tras un abandono, a buscar una nueva pareja. Quizá se sabe fuerte en el tema de conquistar e ir sumando sentimientos y amantes a su vida.
Es, ya lo hemos dicho, un signo, el del león, que supedita el amor a la razón. Leo es un signo que está acostumbrado a ser él (o ella) quien dice adiós, por ello una ruptura por parte de la otra persona es un drama, quizá más en lo personal que en lo emocional.
Leo no acepta que lo aparten y que le digan no. El daño quizá, como estamos viendo, se produce más en el ego de los Leo antes que en el corazón, si bien, el corazón también soportará, a la larga, el peso de la soledad, o al menos la ausencia de un verdadero amor, porque es un signo, el del león, tendente a la búsqueda de un hogar y de un proyecto de futuro serio, consolidado y acomodado a sus gustos, en la mayoría de los casos
Sea como fuere, los Leo no dejan de ser personas con sentimientos. El dolor latirá dentro de su pecho en situaciones como está. Dolor y decepción serán ocultados quizá por vanidad y orgullo.
Compatibilidad del Signo Leo
Leo es un signo de fuego. Posee una personalidad arrolladora, fiel, cariñoso, aventurero y con gran seguridad en sí mismo. Es, además, un signo que detenta, por naturaleza gran capacidad de liderazgo. Unas características tan marcadas hace que sea una personalidad óptima y aconsejable para algunos signos zodiacales y desastrosa para otros.
Aquellos signos más inseguros, aquellos que detentan una personalidad más insegura y con una gran necesidad de apoyo tienen una pareja excepcional en los Leo, sin embargo para otros con mayor grado de autonomía o temperamento, el resultado puede ser explosivo.
En adelante hablaremos, por lo tanto, de grado de compatibilidad entre Leo y los distintos signos. Si tienes un amigo o una amiga Leo y quieres saber más sobre su personalidad o si la chica o chico que te gusta es Leo, aquí te ofreceremos unas directrices generales sobre tu compatibilidad con esa persona. Una información valiosa a la hora de decidirnos a dar un paso más o no.
Los signos de mayor compatibilidad con leo serán:
- Tauro. En principio existe un rango muy alto de compatibilidad. Pese a tener algunas diferencias, tauro puede ser un excelente complemento de leo. Son signos de gran inteligencia y reflexión, capaces de supeditar sus instintos para que la relación fluya y se proyecte en el tiempo y en los corazones.
- Cáncer. Nuevamente, el temperamento del león hace que, en principio y de modo superficial, no encaje con cáncer. Sin embargo leo puede aportar a cáncer seguridad y confianza en sí mismo. Por otra parte, el cariño y la ternura interiores que ambos signos acumulan en su interior es una cuestión definitiva que puede salvar cualquier diferencia. Re-descubrirse el uno en el otro es una experiencia fascinante que solo un leo puede descubrir en un cáncer.
- Sagitario. De gran compatibilidad. Son dos signos de fuego. Destaca el gran romanticismo de sagitario. Es, además, un signo que puede encontrar su complemento en la seguridad y la fortaleza mental del león.
- Al respecto de Aries, podemos decir que en la interacción de estos dos signos existe una gran atracción inmediata (puede ser física, intelectual, espiritual o incluso emocional). Sea como fuere son signos que se complementan a la perfección.
- Libra, regido por Venus, diosa del amor, hace que leo sienta pura atracción hacia esta casa zodiacal. Especial atracción por cuestiones sexuales entre ambos signos, provocando una auténtica explosión de sensaciones, fantasías y descubrimientos en este campo.
- Dejamos al signo de Leo para el último. Leo con Leo (fuego con fuego) es una mezcla explosiva. Presentan un grado de compatibilidad muy alto. Posibilidad de una atracción instantánea y letal para el corazón de ambos, desencadenando un idilio ardiente y de los que dejan huella. Es posible que a través de la atracción carnal alcancen una trascendencia espiritual, una unión corpórea que implica también unión kármica y espiritual. A través del sexo y la atracción es posible llegar al amor, para un leo con otro leo, y planear un proyecto de convivencia a largo plazo.
Sobre los signos que menor grado de compatibilidad presentan con Leo:
- Escorpio, es un signo de agua que, por esencia y por naturaleza se lleva mal con leo. La atracción inicial que pudiere existir entre estos dos signos puede terminar en debacle personal y espiritual.
- El orgullo de Leo choca de lleno con el orgullo de los Capricornio. Por ello y por la obstinación de ambos signos, la convivencia se hace complicada y llena de trabas y reproches. Poca afinidad entre ellos.
- Acuario. Signo poco compatible con Leo. Nuevamente el temperamento y la manera de ser del león chocará con las intenciones y la personalidad, marcada e independiente, de este signo de agua.
- Piscis. En este caso se puede hablar de una negatividad inherente a la relación entre ambos. Piscis hará de Leo un ser vulnerable y sometido, lo cual puede conducir a una relación peligrosa y una vida infeliz para el orgulloso león.
- Con Virgo existen profundas diferencias. Ambos signos tienen que trabajar mucho, y dejar atrás parte de su orgullo si quieren llegar a una relación sana y prometedora.
Cómo es el Hombre Leo
El hombre leo desarrolla una de las personalidades más fascinantes, poderosas e hipnóticas del orbe astral. Para que no caigas presa de su hechizo y puedas ser tu quien lo hechices a él, te mostramos algunos rasgos esenciales de su personalidad.
La casa astral del antiguo regente del signo Leo viene determinada por el elemento fuego y por el planeta sol. Estos dos elementos condicionan, en gran manera, todo ser nacido bajo el dominio de esta casa, tan poderosa y antigua que algunos sabios persas y sumerios pensaban que varias estirpes de dioses antiguos y nobles descendían de esta casa astrológica.
Es por lo anterior que se asoció esta constelación al rey de todos los animales, al más poderoso y el más temible: el león.
La conjunción del sol y del fuego determina una personalidad, en el caso del varón leo, centrada en un poder y un derroche de energía inusitados. Sed de poder y ansia de victoria. El hombre leo suele tener un perfil alto en inteligencia y de poder, en una vertiente claramente material o vital.
En otro sentido, el sol dota al hombre leo de magnanimidad y generosidad, ya que es, el rey de todos los astros, el más grande y poderoso de todo el orbe astral.
Esta dialéctica entre sol y fuego es el secreto de un equilibrio claro y muy meditado, el cual caracteriza al varón nacido bajo la casa del león.
Fuerza, inteligencia, resistencia, coraje, creatividad, generosidad y un alma noble y fuerte son algunos de los rasgos que definen la personalidad del hombre leo. Es también un ser ambicioso.
Un leo es, en esencia, un ganador nato. Son personas con carisma de masas nacidas para dirigir o gobernar. Es, además, un signo muy poco sensitivo o emotivo, hecho que le permite, al hombre leo, prescindir de sentimientos para lograr sus objetivos.
Una de las obsesiones del hombre leo es el control de todo y de todos, lo cual puede provocarle algún problema a la hora de convivir o de relacionarse socialmente.
En el trabajo, igual que en la vida, el hombre leo es obstinado, perseverante, racional, trabajador, efusivo y ganador. Si tenemos algún leo cerca, en nuestro trabajo, a buen seguro, más que competir contra él, lo ideal será aprender de una personalidad como la que nos ocupa. Solo así, observando, comprendiendo y aprendiendo podremos llegar a conocer la metodología del paciente y obstinado rey de reyes, el hombre leo.
Como rasgos negativos señalaremos su orgullo y su vanidad, desmesurados. También la obstinación que a veces le impide acatar las buenas ideas de otros, y perseverar en las suyas propias, por muy equivocado que esté.
Lo peor para un leo es la humildad, quizá la valentía de reconocer errores y equivocaciones, en cualquier aspecto de su vida, hecho que le puede generar no pocos disgustos y conflictos con el entorno que le rodea.
Es también un tipo de personalidad que no depara en gastos económicos ni personales. Al hombre leo le gusta la ostentación y la buena vida, sin pensar en el gasto o perjuicio que ello pueda suponer a terceras personas como familia, esposa o hijos.
Es, en este sentido, un signo un tanto egoísta, por lo que debemos hablar con él y sopesar constantemente que cuestiones son más importantes si los caprichos del hombre leo o quizá, las necesidades de su familia o sus hijos.
Leo es del todo un ser reflexivo, por lo que muy pronto comprenderá la situación y, en este sentido, se evitarán disputas y desacuerdos, sobre todo en un contexto social y familiar.
Leo, pese a todo no deja de ser el paradigma del hombre triunfador y victorioso. Lo lleva en sus genes y en la naturaleza de su casa astral, siempre se crecerá ante cualquier adversidad y se superará gracias a su trabajo, su capacidad de sacrificio y su inteligencia.
Cómo es la Mujer Leo
La mujer leo y su singularidad. Su belleza, su hermetismo y su influjo intenso y apasionado…
Leo, debido a la naturaleza de su casa astral, ha desarrollado una personalidad muy especial y única. Segura de sí misma, carismática, con excelente gusto por lo estético y la apariencia, la mujer leo sabe, como muy pocas, ejercer su poder, su hechizo y su influencia sobre las personas que le rodean, en especial sobre los hombres.
La mujer leo comparte con el hombre de su mismo signo, la inteligencia, la capacidad de influencia sobre otros, el buen gusto y el placer por el lujo y una vida ordenada y plena.
El éxito en todos sus planteamientos, para una mujer leo, más que una opción es una necesidad. Las mujeres nacidas bajo el signo del león regente basan gran parte de su vida y sus objetivos en la complacencia social y el carisma ejercido en sus grupos sociales o familiares.
Para la mujer leo uno de los mayores placeres es mostrarse triunfante, sofisticada y especial tanto para sus amistades como para su familia y su entorno laboral.
Tanto en el trabajo como en la vida marital, la mujer leo suele ser ordenada, muy racional y tendente a llevar el control de la casa y de la familia. Este hecho puede provocar serias desavenencias y choques con según que otros signos, dentro de una convivencia familiar.
No admite, por otra parte, que le contradigan y, al igual que el hombre leo, difícilmente admitirá sus errores o equivocaciones, aunque su responsabilidad y su amor propio si hará que los asuma y, a la postre, que los reconozca.
En el sexo, la mujer leo tiene la capacidad de desinhibirse y ser una excelente amante. Ella guarda una fiera en su interior que muy pocos y solo aquel que verdaderamente se gane su corazón puede hacer salir.
La propia mujer leo es altamente exigente consigo mismo, también lo es con aquel que quiera ganarse su corazón. Para ello se debe estar a la altura, tanto intelectual como físicamente. Así mismo, una buena estrategia para ganarnos el poderoso corazón de una mujer leo será mostrarnos honestos, sinceros y hasta cierto punto humildes. El hecho de que una mujer leo pueda sentirse algo superior al hombre es una cuestión que suele valorar en gran medida, sobre todo en los primeros momentos de la relación.
Para evitar conflictos, dentro del contexto familiar, debemos saber y conocer su temperamento y ser extremadamente diligentes, diplomáticos y cuidadosos a la hora de establecer determinados temas o posturas, ya que la intransigencia de una mujer leo puede ser causa de profundas desavenencias y discusiones.
Es una mujer, además, detallista que valora cada detalle, cada gesto y cada palabra. La inteligencia le hace, además de bella, poderosa y descubridora de toda mentira o media verdad, por lo tanto… totalmente desaconsejable aparentar lo que no se es, delante de una mujer leo.
En un contexto laboral, la mujer leo es sofisticada y dotada para la dirección o el mando. Es perfeccionista, racional y obstinada en sus proyectos. Aunque no valora en exceso a sus compañeros, si resulta interesante observar y aprender como desarrolla su trabajo una mujer leo.
Diremos, por último, que una mujer leo puede aportar grandes emociones e interesantes hechos a nuestra vida. Sin descuidar el plano sentimental, ella sabrá, como nadie, hacernos crecer intelectual y mentalmente.
Solo el amor, las atenciones y el sincero cariño pueden convertir al león que vive dentro del pecho de la mujer leo en un puro e intenso sentimiento de posesión, pero también de entrega, complacencia y afinidad amorosa.
Ritual de Amor para Leo
¿Se muestra esquivo el amor contigo? ¿Sientes que amas pero no se fijan en ti? Quizá sueñas con ese chico o esa chica Leo a tu lado, ya para siempre, pero te da miedo decírselo. Nosotros te damos la solución, de manera sencilla pero efectiva y duradera en el tiempo: un ritual de amor para atrapar el corazón de los Leo.
Los Leo pertenecen a una poderosa casa astral que determina, en buena medida su fuerte temperamento y una tendencia al pragmatismo y a contener sus sentimientos.
Por ello quizá seducir a una mujer leo o a un hombre leo puede ser complicado, laborioso y a veces imposible. No te preocupes, nosotros te mostraremos cómo enamorar a un Leo a través de la esencia de su personalidad y su casa astral a través de un ritual de amor sencillo pero poderoso y duradero.
Leo es un signo marcado por el astro Sol. El color dorado de esta casa astral determina una fuerte influencia y trascendencia el astro rey sobre el rey de los signos zodiacales. El sol es un astro que imprime temperamento y fortaleza física a los Leo.
Es precisamente por este marcado rasgo, la influencia del sol sobre la casa astral de los Leo, por lo que el color que determina dicho signo del zodiaco es el dorado, el oro es el metal que más trascendencia tiene sobre los sujetos de esta casa. Además, como piedra canalizadora de todas las energías para un Leo podemos citar el rubí. En cuanto a elemento de la naturaleza, podemos citar el girasol.
Ceremonia de amarre para enamorar a un Leo
Para lograr una ceremonia de amarre efectiva y potente debemos proyectar toda nuestra energía y sentimientos sobre la persona amada. Ello puede ser, en determinadas ocasiones, verdaderamente complicado y decepcionante.
En este caso, para cerciorarnos y estar seguros de que logramos influir en el corazón y los sentimientos del temido y temible Leo podemos realizar una ceremonia de amor, con algunos de los objetos mencionados anteriormente y que mejor canalizan y proyectan nuestra energía hacia la persona Leo.
En primer lugar, debemos tomar un objeto especial sobre el que debemos proyectar cuando sentimos y podemos llegar a hacer sentir a la persona deseada.
Debemos elegir un objeto que regalaremos a la persona Leo y sobre el que proyectaremos nuestros sentimientos. En principio no tiene porque ser algo comprado, aunque si se recomienda que sea oro, metal dorado, o algún tipo de elemento natural relacionado con los girasoles o el color amarillo, ya que, como hemos dicho, son los elementos que mayor impacto y mejor llegan al corazón de los Leo.
Con dicho objeto hemos de ponerlo sobre un altar o una mesa y rodeado de dos velas rojas, dejaremos que los minutos, nuestro deseo y nuestros sentimientos impregnen ese objeto.
Es importante tocarlo para proyectar nuestra energía y colmarlo de sentimientos positivos y de atracción. Debemos, mientras lo tocamos y a la luz de las velas vernos con esa persona en distintas situaciones y actitudes. Por otro lado y justo durante la media noche debemos escribir el nombre de nuestro amado sobre un papel blanco con un lápiz y dejándolo sobre el objeto que le regalaremos pronunciaremos lo escrito (su nombre) hasta siete veces.
Las velas, símbolo de la iluminación, la pasión y el fuego elemento que marca y determina la esencia de los Leo, serán los testigos de nuestro amor y de cuán profundos son nuestros sentimientos.
Realizado este rito de amor, dejaremos toda la noche el objeto y que se consuman las velas.
Con el amanecer debemos recoger el objeto, impregnarlo de nuevo de nuestro tacto y nuestro calor y disponerlo para ser entregado a esa persona.
Es un rito de amor infalible. Verás como en muy poco tiempo ese chico o chica leo comienza a mirarnos de otra manera, de un modo más intenso y como su rubor le delata aquello que siente dentro de sí por nosotros.